El director general de Aguas del MOP, Rodrigo Sanhueza y el secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego, Wilson Ureta, se reunieron en Los Ángeles con el directorio de la Junta de Vigilancia del Río Biobío con el objeto de abordar la nueva política de gobernanza hídrica con la implementación del Consejo de Cuenca del Biobío.

El consejo de cuenca se presenta como una instancia que coordinará acciones orientadas a la gestión integrada de las aguas, albergando a todas y todos los actores con interés por el tema, ya sean públicos, privados y de la sociedad civil que estén insertos en esta unidad territorial indivisible.

El director general de Aguas explicó que en todas las regiones del país se trabajó con cada una y uno de los gobernadores regionales para definir la cuenca piloto, en el caso de la región del Biobío resultó ser la cuenca del río Biobío.

“La Junta de Vigilancia tiene un papel central en la administración y distribución de las aguas a las que tienen derecho sus integrantes, y esas atribuciones las seguirán ejerciendo. En ningún caso estos consejos de cuenca reemplazarán a las organizaciones de usuarios ni a los servicios públicos con competencia en materia de aguas.

La idea es que, en esa instancia, organizaciones de usuarios y servicios públicos junto a otros actores que intervienen en la cuenca trabajen colaborativamente para ir solucionando los conflictos que se dan en el territorio en torno al agua”, comentó.

A su vez, el secretario ejecutivo de la CNR sostuvo que “fue una reunión muy fructífera con las distintas organizaciones de usuarios de agua, con la hidroeléctrica y sanitaria, con el objetivo de poder promover y buscar también su apoyo y el trabajo conjunto en el marco de la instalación de los consejos de cuenca en la región.

Es una política pública del gobierno del presidente Boric, que incluye ampliar la mirada de lo que se entiende como gestión del agua, y también con una visión holística de la cuenca”.

Respecto a la oportunidad que significa la conformación de esta instancia de gobernanza, el presidente de la Junta de Vigilancia del Río Biobío, Juan Vallejos, afirmó que “la reunión fue tremendamente productiva e informativa porque pudimos conocer de primera fuente el estado en el que está el proyecto de conformación de consejo de cuencas piloto para la región del Biobío, y creo que es un desafío tremendo para toda la sociedad el poder contar con esto”.

Cabe señalar que la Junta de Vigilancia de la Cuenca del Biobío reúne a 487 usuarios individuales y a 3.897 regantes pertenecientes a las 118 organizaciones de usuarios existentes, entre comunidades de aguas y asociaciones de canalistas que son parte de la Junta.

En el encuentro, en el cual también estuvieron el director regional de Aguas del MOP Biobío, Claudio Morales; la SEREMI de Agricultura, Pamela Yáñez y el coordinador zonal Biobío-Ñuble de la CNR, Jorge Muñoz, las autoridades de gobierno informaron que el consejo de cuenca tendrá carácter resolutivo y que su principal instrumento de gestión será el Plan Estratégico de Recursos Hídrico elaborado por la Dirección General de Aguas (DGA), en el cual el consejo definirá la vocación o imagen objetivo de la cuenca.

Además, la DGA ejercerá el rol de Secretaría Técnica, teniendo como tareas liderar la elaboración del Plan Estratégico de Gestión de Recursos Hídricos en Cuenca; realizar las coordinaciones entre actores que le encomiende el consejo; sistematizar y disponer la información técnica que requiera el consejo; proporcionar la asesoría técnica al consejo; realizar seguimiento y monitoreo de los compromisos y levantar actas del consejo y directorio, entre otros.

Mientras que el consejo deberá tener presente velar por el resguardo del consumo humano y el saneamiento, la preservación del ecosistema junto con propender al equilibrio entre eficiencia y seguridad hídrica, junto con promover la asociatividad como mecanismo de representación para la participación.

En concreto, entre las funciones ya establecidas que tendrá el consejo de cuenca será coordinar a los distintos actores con interés en la gestión de aguas, promoviendo acuerdos y resolviendo posibles conflictos entre ellos; acompañar el proceso de elaboración del Plan Estratégico de Recursos Hídricos de la cuenca, realizar su seguimiento y promover las acciones allí contenidas; identificar y sistematizar programas y proyectos de recursos sectoriales públicos y regionales como del sector privado para postular como consejo.

Al respecto, Sanhueza mencionó que a través de la experiencia adquirida en el desarrollo de la implementación de los “Consejos de Cuenca Piloto”, se trabajará colaborativamente en un proyecto de ley sobre su estructura orgánica y principales funciones, por lo que es fundamental la participación de las organizaciones de usuarios en esta instancia.

Sanhueza agregó que para sacar adelante los consejos de cuenca se formaron cuatro Unidades Técnicas Macrozonales con profesionales del ministerio de Medio Ambiente, DGA del MOP y CNR e INDAP del ministerio de Agricultura, cuya tarea ha sido identificar y realizar el mapeo de actores relevantes, para luego levantar información con los actores identificados y coordinar la implementación de los denominados Grupos Promotores, que puedan ser los cimientos del proceso de conformación de los consejos de cuenca piloto.