El déficit habitacional en el país asciende a más de 640 mil viviendas y para enfrentar la crisis, el Gobierno comprometió la entrega de 260 mil residencias al 2026.

En una sesión extraordinaria en el Senado, el ministro de Vivienda, Carlos Montes, detalló los avances del "plan de emergencia habitacional", luego de que voces de la oposición cuestionaran la velocidad con la que se está llegando con las viviendas.

Según Montes, "hay 39 mil viviendas entregadas, 136 mil en construcción y en 52 mil casos se han presentado las carpetas y definido el financiaminto". Junto con lo anterior, aseguró "estar caminando en la línea que corresponde".

No obstante, el Secretario de Estado identificó una serie de problemas que prodrían complejizar el desarrollo de este plan. Uno de ellos es la situación financiera que están atravesando algunas empresas vinculadas a la construcción de viviendas. "Hay empresas que no quebraron, pero que están con problemas", dijo Montes.

En esa línea, aseguró que el ministerio está "preocupado en trabajar empresa por empresa". Asimismo, advirtió la amenaza de que "se levante un riesgo de protestas".

Según el titular de vivienda, "en una coyuntura que se acerca a lo electoral, pueden haber muchos grupos buscando incentivar las situaciones". "Muchas familias en el país, lo que están viviendo es tan fuerte, que en la medida que hay grupos que empiezan a ofrecer cosas, puede generarse un cuadro que no sabemos el desenlace que puede tener", añadió.

Otra de las dificultades que expuso el ministro de Vivienda fue el "tejido social" y lo vinculó con las seguridad de los barrios. "No basta con construir viviendas, si no que es cómo se construye la vida en la comunidad.

Para eso se requiere buscar alternativas. Hoy tenemos un problema porque en muchos casos, al poco tiempo de estar viviendo en un lugar, vienen persona vinculadas a las drogas y se echa a perder la cosa. Si no lo asumimos, estamos negando la realidad y tenemos que ver cómo asumirlo", dijo.

Además, aseguró que "la coordinación intersectorial no es fácil, especialmente porque necesitamos romper la idea de que primero llega la gente, después están los problemas y después llega el consultorio, la escuela, el jardín y ciertas inversiones de barrio". Finalmente, indicó que acceder al "al suelo de algunas instituciones públicas es difícil.

El Presidente envió un oficio a cada institución para poner a disposición de este plan aquello que no estuvieran usando".