Uno de los debates que ha surgido a propósito de la emergencia desatada por los incendios que arrecian en la zona centro-sur del país es la regulación de la industria forestal, en vista de la rápida propagación de los siniestros en plantaciones sembradas con monocultivos.

Debate al que esta tarde, desde la comuna de Quillón en Ñuble, se sumó el Presidente Gabriel Boric, quien aseguró que debe existir una “regulación distinta” para la industria forestal tras la crisis desatada por los incendios.

“He planteado a los parlamentarios, al alcalde, que tenemos que tener una discusión de más largo plazo con el tema de la industria forestal, una regulación distinta”, planteó el jefe de Estado.

Sin embargo, hizo hincapié en que lo prioritario en este momento es que el sector público y el privado actúen en coordinación para enfrentar la emergencia que ya cumple una semana.

“Hoy día estamos abocados en conjunto en combatir la emergencia, sector público y sector privado, tenemos que estar en conjunto. Pero tiene que haber una regulación que permita establecer todas las prevenciones porque las condiciones climáticas van a ser cada vez más adversas, pero tenemos que generar todo lo que esté a nuestro alcance para prevenir y disminuir el nivel de riesgo, en eso el sector privado y el sector público tienen que trabajar de conjunto”, apuntó el Presidente.

En esa línea, un estudio del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2 sobre las causas de la propagación de este tipo de siniestros indicó que “el riesgo de incendios se concentra en mayor proporción en los paisajes dominados por plantaciones forestales y, en menor grado, en aquellos dominados por bosque nativo”.

Ana Albornoz, alcaldesa de Santa Juana, una de las comunas más golpeadas por la emergencia, también enfatizó en la necesidad de contar con mayor regulación y fiscalización respecto a este tipo de plantaciones. “Tenemos que instalar el problema de fondo para tener una solución a largo plazo y no repetir esto mismo el verano del próximo año. Las empresas forestales no se someten al SEIA, como el resto de las empresas. Entonces es necesario ponerlo ahora sobre la mesa, porque si no va a pasar”, señaló Albornoz en conversación con Radio Sonar.

En rigor, según la Ley 19.300, que regula la institucionalidad ambiental, las plantaciones forestales deben ingresar al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) cuando poseen dimensiones industriales, es decir, cuando se trate de proyectos que superen las 500 hectáreas anuales en el caso de la Región Metropolitana y Valparaíso, y mil hectáreas en las regiones de la zona centro-sur.

“Entonces, quedan varios proyectos fuera del SEIA. Al no ingresar, la Superintendencia de Medio Ambiente no las puede fiscalizar, porque sólo se someten al SEIA aquellos proyectos forestales que se realicen sobre suelos frágiles o en terrenos cubiertos de bosque nativo en las dimensiones que da el reglamento”, explicó el abogado ambiental y exsubsecretario de Medio Ambiente, Jorge Canals.

La emergencia provocada por los incendios forestales aún mantiene a las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía bajo Estado de excepción constitucional de Catástrofe. Según el último balance de Senapred, los incendios forestales en desarrollo en el país disminuyeron en 24 horas, pasando de 329 reportados el día ayer a 321. De esta última cifra, 94 siniestros se encuentran en combate y 180 controlados. En cuanto a los daños, se contabilizan 293 mil hectáreas arrasadas y 5.419 damnificados.