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Crónica
Salud
11/01/2023
La Comisión Ciudadana de Vigilancia presentará el viernes su primer informe relacionado con la Ley Ricarte Soto, pero este miércoles se dio a conocer un adelanto que señala que dicha norma no sería sostenible y pide una evaluación de las coberturas.
Si la ley “continúa funcionando con las mismas condiciones actuales, no sería sostenible en el tiempo, por lo que esta problemática requiere ser abordada de forma prioritaria y con urgencia”, señala el informe, según publicó Radio Cooperativa.
Pablo Vidal, académico de la Facultad de Medicina de la Universidad del Desarrollo y miembro de la comisión, indicó que “se hizo una proyección de los ingresos y gastos, y con las prestaciones que ya están comprometidas, al año 2027 no habría ninguna holgura, y en 2028 tendríamos más gastos que ingresos. Pero además se proyecta que haya un aumento de beneficiarios, en la medida que pase el tiempo, y también debiera haber un aumento de las prestaciones”.
A su vez, Myriam Estivill, directora de la Fundación Chilena de Enfermedades Lisosomales e integrante de la misma comisión, afirmó que “además de estar atrasados más de un año con el quinto decreto, el cual permite el ingreso de nuevas tecnologías y tratamientos, estamos muy preocupados por los recursos existentes, lo que hace que nos preguntemos, sin la Ley Ricarte Soto, qué sucederá con los pacientes que padecen enfermedades poco frecuentes”.
Respecto a la solicitud de evaluar las coberturas, Vidal señaló que “nos dimos cuenta de que el financiamiento no iba a ser suficiente y se sugieren algunas soluciones, tal vez lo más fácil de sugerir es que se aumente el financiamiento. Pero también que, una vez que algunos tratamientos estén consolidados, se traspasen a las Garantías Explícitas de Salud (GES)”.
También se pidió revisar la definición de tipos de diagnósticos y tratamientos incluidos actualmente, para asegurar que estén alineados con el espíritu de la ley.
Sobre el mecanismo de financiamiento, el académico de la Universidad del Desarrollo sostuvo que “lo que estamos observando es que, en todo el mundo, con la aparición de nuevas tecnologías de tratamientos y nuevos productos, se está haciendo muy difícil financiarlos. Estamos constatando un problema de los costos que tiene la incorporación de nuevas tecnologías para la mayoría de los sistemas de salud”.