Un 71% de las personas sondeadas en la encuesta Plaza Pública Cadem cree que es "poco o nada probable" que el Congreso logre llegar a un acuerdo antes de fin de año sobre cómo debe continuar el proceso constituyente, esto a casi tres meses del plebiscito de salida.

Por su parte, el 19% cree que es "algo probable" que se logre un acuerdo tras los diálogos constituyentes llevados a cabo por los partidos políticos con representación parlamentaria y, por debajo, un 10% cree que es "muy o bastante probable" que se alcance.

Esto va en la línea de lo planteado por los propios parlamentarios, quienes pusieron en duda la posibilidad de alcanzar un acuerdo antes de que finalice noviembre -plazo que apostaba el oficialismo- y que ha derivado en ideas, como por ejemplo, un cónclave para coincidir en una posición respecto al mecanismo para redactar la nueva Constitución. 

A su vez, un 64% dijo estar de acuerdo en que es necesaria una nueva Carta Magna, lo que representa una baja de dos puntos en comparación a la medición anterior, y un 34% piensa que no es necesario. 

En tanto, un 44% de los encuestados dijo que el Congreso debe "actuar con urgencia y llegar a un acuerdo antes de fin de año", frente a un 28% que señaló que el Parlamento debería de "preocuparse de otros temas y que el proceso constitucional no es prioridad".

Sin embargo, otro 27% de las personas manifestó que, aunque el Congreso debería mantener la elaboración de una nueva Constitución como un asunto prioritario, el tema bien podría quedar pendiente para el próximo año.

PLAZOS Y COMPOSICIÓN

En el sondeo se consultó que, si se acuerda la necesidad de tener una nueva Convención Constituyente, cuál es el tiempo necesario para redactar una nueva propuesta: un 62% de los encuestados dijo que sean seis meses; mientras un 36% apunta a los mismos 12 meses vistos anteriormente. 

Sobre la cantidad de convencionales, el 44% respondió que sea más pequeña (de 100 miembros); un 38% apunta a replicar al Senado (con 50 constituyentes) y, más por debajo, un 17% indica que se mantenga la misma cantidad de convencionales (es decir, 155, replicando a la Cámara Baja). 

Acerca de la eventual inclusión de expertos en el órgano redactor y ante la pregunta de cómo se deberían elegir, un 53% contestó que en elecciones abiertas; un 20%, que deberían ser escogidos por el Congreso; un 17%, por un consejo de distintas autoridades del país nombrado por el Parlamento, y un 8%, por el Gobierno.