En el marco de su gira de ayer y hoy por la Región de Antofagasta, el Presidente Gabriel Boric endureció el tono hacia las personas migrantes que se encuentran en situación irregular en Chile y que hayan cometido delitos.

El Mandatario encabezó el gabinete regional con autoridades locales y el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, que tuvo como foco la crisis migratoria, de inseguridad y los constantes robos de cátodos de cobre en la zona norte.

Además, instó a los mandos regionales a desalojar los rucos que se han instalado en la costanera de la ciudad de Antofagasta. No obstante, puntualizó "uno no puede satisfacerse solamente con la pretensión de sacarlos un día del lugar".

"La respuesta es más complicada, es intersectorial. Hay que hacer el catastro, ofrecer alternativas, a quienes estén en situación irregular, o se regularizan o se van, y a quienes hayan cometido delitos, derechamente se tienen que ir. Acá no hay nadie que vaya a estar encima de la ley", enfatizó Boric.

Apuntó que "es un trabajo que tiene como prioridad nuestra delegada (presidencial regional, Karen Behrens), que va a hacer este trabajo intersectorial con Salud; en caso de que haya niños, tenemos que garantizar que tengan acceso a la educación; en el caso de Desarrollo Social, los albergues hoy están copados en Antofagasta".

El objetivo es que "tenemos que dar soluciones definitivas, no sencillamente sacar una cosa que para que vuelva a aparecer 30 metros más allá", remarcó.

Desde agrupaciones de migrantes, en tanto, han cuestionado el tono del jefe de Estado.