La reciente visita de la ministra de Desarrollo Social y Familia, Jeanette Vega, a la Macrozona Sur, instaló la polémica, luego que asegurara que no se iban a restituir tierras a las comunidades mapuche que hayan participado de tomas de terreno y hechos de violencia.

Cabe destacar que este año son $35 mil millones que el gobierno del presidente Gabriel Boric invertirá en la compra de tierras para comunidades indígenas en distintas zonas del país.

Esta semana, se entregó el primer predio en la región de La Araucanía: 172 hectáreas a una comunidad mapuche en la comuna de Freire.

"Nosotros no entregamos tierras a comunidades que están perturbadas. Uno de los requisitos para la firma de la compra de tierras, es que no pueden ser comunidades perturbadas y en eso hemos sido clarísimos", aseguró la ministra Vega. 

Por su parte, el Director de la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi), Luis Penchuleo, señaló que "el procedimiento está en la ley de presupuesto, y hoy por ley no podemos comprar ningún predio que esté perturbado, independientemente de la demanda que exista detrás de eso". 

Sin embargo, las comunidades indígenas afirman que el proceso es demasiado lento y que, por lo tanto, tienen que recurrir a la toma de terrenos. 

José Santander, de la comunidad Triftrifko, indicó que "hay conversa, pero eso va muy lento. Si sigue lento, vamos a hacer control territorial y el fundo va a ser para nosotros, y como hermanos lo vamos a repartir".