Desde su primera cuenta pública el pasado 1 de junio, el Presidente Gabriel Boric, ha reiterado la intención de apoyar una ley para la prohibición total de tenencia de armas por parte de civiles.

Incluso, durante su gira por Norteamérica, el Mandatario le señaló al primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, que están evaluando algo similar a la política impulsada en dicho país, que busca congelar el movimiento de armas entre particulares.

Sin embargo, el tema ha generado una nueva tensión dentro del oficialismo. Mientras que desde el Frente Amplio y el PC han mostrado apoyo a la iniciativa, parlamentarios del PPD y del PS no han reaccionado de la misma forma.

En esa línea, el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, destacó la importancia de “tratar de explicar cuál es el sentido de este anuncio del Presidente de prohibir -como criterio general- que los civiles tengan armas”.

Así, Monsalve respaldó la necesidad de “luchar y regular de mejor manera el mercado de armas inscritas legalmente”, ya que “también tiene un impacto respecto a los niveles de violencia y a la disminución de los homicidios de un país”.

El subsecretario reconoce que existe un debate en torno a “por qué se le quita las armas a los civiles y no se actúa contra las armas ilegales”. Precisamente para esclarecer esto, explicó la medida a través de cifras estadísticas.

“Entre enero del año 2020 y abril del 2022, se han incautado 1.500 armas de fuego, de esas 30% eran armas que estaban inscritas legalmente, el 43% no estaban inscritas -por lo tanto son armas ilegales- y cerca de un 26% eran armas cuyo número de serie estaba borrado y no se puede saber”, argumentó.

“Partimos con un piso de que el 30% de las armas que se usan en hechos delictuales vienen del mercado legal, o sea, en algún momento estuvieron inscritas y terminaron en manos de delincuentes”, prosiguió el subsecretario, calificando este último dato como un porcentaje “significativo”.

En esa línea, indicó que la tasa de homicidios en Chile ha aumentado, de hecho señaló que “casi la hemos duplicado, estamos en una tasa en torno a 5.7 homicidios por cada 100 mil habitantes”, agregando que en el 2022, el 60% de los homicidios han sido efectuados con armas de fuego.

En ese sentido, apuntó a que “hoy día si uno mira la situación de los homicidios y del uso de armas, efectivamente Chile está en el peor momento en términos de tasa de homicidio y de presencia de armas de fuego en la comisión de los delitos de homicidio”.

“En aquellas regiones donde hay más homicidios, la tasa de extravío de armas que estaban inscritas legalmente, es más alta. Por lo tanto, hay un fundamento sólido respecto a la postura del Presidente de hacer como excepción el uso de armas de civiles, pero como principio general prohibirlo”, sostuvo.

De la misma forma, Monsalve indicó que se revisará la situación del mercado ilegal, poniendo foco en las aduanas y la identificación de las armas modificadas, es decir, aquellas que se ingresan separadas por partes.

Asimismo, destacó que la propuesta realizada por el Presidente, con respecto a la prohibición de la tenencia de armas, es parte de un foco mayor en la lucha contra el crimen organizado: “Las personas que están en sus casas lo saben bien, saben cuál es la amenaza que el crimen organizado hoy es para la democracia, pero también para la vida y seguridad de las personas”, sentenció.