Queda poco para que el verano termine y con ello la pandemia ha ido mostrando señales de estabilización, luego de que marcara las alzas más importantes de contagios durante casi todo el periodo estival, a raíz de la llegada de Ómicron en diciembre.

Era un hecho que el virus acompañaría a los chilenos y chilenas en sus vacaciones: precisamente, el peak se registró el pasado 11 de febrero con 38.446 casos.

El ministro de Salud, Enrique Paris, dio cuenta de la baja de este nuevo escenario epidemiológico. "Podemos informar que son 16 las regiones que disminuyen los nuevos casos confirmados en los últimos siete días y 14 regiones disminuyen en los últimos 14 días", enfatizó.

Dicho de otro modo: un -20% a siete días y en un -24% a 14 días. Además, destacó que "por primera vez ninguna región aumenta sus casos confirmados en los últimos siete días, una noticia muy importante para el avance de la pandemia en Chile". Asimismo detalló que presentaron una disminución de -33% en comparación al peak que se registró en la semana entre el 7 y el 14 de febrero, cada 100 mil habitantes .

En efecto, febrero fue complejo. Los contagios diarios a nivel nacional suman 842.360, es decir, casi el triple de lo que registró enero, que concentró 333.792. En tanto, se reportaron 2.632 decesos; en enero hubo 606.

Al observar el comportamiento de Ómicron por región, se observa que ocho regiones registraron durante enero y febrero más casos que todo 2021, entre ellas, aquellas de la zona norte del país, la más afectada por el ingreso temprano de esta mutación: Tarapacá, Antofagasta, Atacama y Coquimbo; en el centro, Valparaíso; y hacia el sur, Ñuble, Aysén y Magallanes (ver tabla).

En tanto, dos regiones concentraron, durante esos meses, el 50% de los casos que han tenido durante toda la pandemia y otras 10 regiones concentraron el 40% de los casos registrados en estos dos últimos años.

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