La pediatra infectóloga Leonor Jofré planteó que la variante Ómicron del Covid-19 impactó con mayor fuerza a los niños que las cepas anteriores, aunque reiteró la necesidad de retomar las actividades presenciales a partir de marzo.

Jofré recordó que "esta variante ha golpeado fuerte y así como hemos visto en otros países, el aumento de los casos en la población pediátrica ha sido en forma muy importante. Obviamente las hospitalizaciones aumentaron, especialmente en los niños pequeños y en los niños que tienen algún factor de riesgo como una comorbilidad o que no estén vacunados, pero en general hemos visto en la mayoría de los casos que han sido de manejo ambulatorio".

"El impacto que tuvo esta variante en los niños ha sido mucho mayor que con las variantes anteriores", agregó.

La doctora recalcó que "una de las prioridades es que los niños vuelvan a sus actividades normales, actividades presenciales. Lo que hemos visto en estos últimos días es que han ido bajando el número de casos y de acuerdo a la experiencia previa de Europa, que predominó esta ola en base a la variante ómicron, probablemente esto va a ir bajando, alcanzando una meseta hasta estabilizarse a unos niveles más bajos durante las próximas semanas".

"Claramente, los beneficios de que los niños estén en clases es superior en todo sentido, pero hay que extremar las medidas, tener horarios diferenciados de recreos, horarios de comida, como se está haciendo en otros establecimientos, y lo más importante es privilegiar la ventilación natural, los ambientes al aire libre", puntualizó.

"Tenemos que aprender a convivir con este virus, no nos va a dejar en un periodo muy cercano (...) vamos a tener que intentar volver a nuestra normalidad y eso incluye que nuestros niños entren al colegio", finalizó la experta.