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Crónica
02/11/2024
¿Usted acepta dejar el 10% de propina sugerida? La pregunta que suelen realizar los garzones se está extendiendo más allá de los restaurantes, pubs, cafeterías o bares, llegando también a servicios como barberías y peluquerías e incluso a locales de comida rápida sin servicio a la mesa.
Asimismo, se ha vuelto común que, al realizar pedidos en plataformas de delivery, antes de recibir el producto, se deba pagar por la comida, el uso de la plataforma, la entrega y, además, en algunos casos se solicita al cliente el 5, 10, 15 o incluso hasta el 20 por ciento o de propina por un servicio aún no recibido.
Ante ello el Servicio Nacional al Consumidor (Sernac) realizó una fiscalización a cuatro aplicaciones de entrega de comida y, tras detectar incumplimientos a la Ley del Consumidor, decidió llevar ante la justicia a tres de esas compañías.
"Poniendo en el centro a los consumidores, ellos no pueden ser emplazados a pagar cifras adicionales predefinidas en un modelo de negocio en el que se calcula -además- este monto extra sobre la base del pedido, del costo del servicio, al mismo tiempo el costo del delivery, es decir, un monto de una propina que excede incluso el 10 o el 15 por ciento del monto total", explicó Andrés Herrera, director del Sernac.
"Entonces, vamos a denunciar ante la justicia este tipo de infracciones (por parte de) Uber Eats, Rappi y Pedidos Ya", agregó.
En caso de que los tribunales determinen que alguna de estas tres empresas está infringiendo la Ley del Consumidor, arriesgan multas de hasta 300 UTM, es decir, más de 19 millones de pesos por cada infracción cometida.
Tras la mencionada fiscalización, una cuarta empresa, la plataforma Justo, decidió modificar su modelo de negocios y no predefinir una propina a los consumidores.
El presidente de la Corporación Nacional de Consumidores y Usuarios (Conadecus), Hernán Calderón, respaldó la fiscalización del SERNAC y abogó por un cambio en la legislación: "Cualquier comercio que obligue a pagar una propina está cometiendo una infracción".
"Desde ese punto de vista, en la tramitación del proyecto de ley debiera establecerse una multa contra el comercio que aplique propinas obligatorias. El consumidor es el que decide si la otorga en el monto sugerido, o puede ser menor, lo que él considere, o mayor, si lo considera también", complementó.
En ese sentido, el dirigente enfatizó que "la propina debe seguir siendo voluntaria".
Proyecto de ley que regula las propinas
En la Comisión de Economía de la Cámara Baja se dio inicio a la tramitación de un proyecto de ley que apunta directamente a prohibir que se sugiera o exija el otorgamiento de propinas en establecimientos que no cuenten con atención de garzones, con la finalidad de evitar que se incomode a los clientes con este tipo de prácticas.
En caso de incumplimiento a la Ley del Consumidor, la iniciativa propone una multa, a beneficio fiscal, de hasta 5 UTM (alrededor de 330 mil pesos).
El diputado Vícto Pino (Demócratas, exPDG), principal impulsor del proyecto, explicó que "hay otros establecimientos que están (sugiriendo propinas) fuera del marco que el artículo 64 del Código del Trabajo establece. Lo que estamos buscando es que esto se prohíba hacia los otros establecimientos que no tengan relación a lo que el artículo 64 nos está presentando en este momento".
"Sugerir propina, (pero) no la voluntariedad de la propina. Vamos a seguir siendo libres de poder entregarla si la queremos, pero el negocio no puede sugerir al consumidor: 'oiga, ¿va a dejar propina?', eso es lo que queremos dejar establecido en la ley", indicó el parlamentario.
Adicionalmente, el Sernac está desarrollando una fiscalización sobre dos cadenas de peluquerías, Palumbo, y Glam & Co, donde se ha detectado que sus trabajadores presionan a clientes para que les dejen una propina, mientras las empresas ponen a disposición sus medios de pago para recaudar el dinero.
De momento, el organismo está a la espera de la respuesta formal de estas mencionadas cadenas.