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22/03/2024
Las autoridades de Japón se encuentran en alerta, luego de que los casos de síndrome de choque tóxico estreptocócico (STSS, por sus siglas en inglés) se dispararan durante las últimas semanas.
Se trata de "una infección bacteriana rara, pero grave, que puede evolucionar rápidamente produciendo baja presión arterial, insuficiencia multiorgánica e incluso la muerte", según indican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos en su página web.
Además, la institución señala que "incluso con tratamiento, puede ser mortal. De cada diez personas con este síndrome, tantas como tres morirán a causa de la infección". ¿Pero cuáles son sus causas?
Este síndrome es causado por una bacteria denominada estreptococo del grupo A, y en casi la mitad de los casos, los expertos no saben cómo entró al cuerpo de las personas.
A veces, ingresa a través de cortes en la piel, como una lesión o una herida quirúrgica, pero también lo puede hacer por las membranas mucosas como la nariz y la garganta.
La enfermedad no es nueva. De hecho, se identificó por primera vez en Japón hace más de tres décadas, y desde entonces se notificaban una media de entre 100 y 200 casos anuales, en una población de unos 125 millones de habitantes.
Previo a la pandemia, la prevalencia fue creciendo y, en el año 2023, el número de pacientes diagnosticados con la bacteria alcanzó una cifra récord, ya que se registraron 941 casos, según los datos del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas (NIID) recogidas por medios nipones.
Sin embargo, estos han seguido aumentando durante este año. "En lo que va de 2024 y hasta la fecha, se han reportado cerca de 400 casos, lo que representa un incremento preocupante en comparación con años anteriores", dice Sebastián Ugarte, jefe de la Unidad de Pacientes Críticos de la Clínica Indisa. Este incremento se traduce en que en menos de dos meses, ya se acumulan un 40% del total de los pacientes que se detectaron el año pasado.
El ministro japonés de Sanidad, Keizo Takemi, aseguró que la causa exacta del incremento de casos es desconocida, pero consideró probable su relación con el repunte de afecciones respiratorias en la era pospandémica, después de que el covid haya sido catalogado como una enfermedad equiparable a la gripe estacional y el Gobierno haya relajado algunas medidas de prevención.
El síndrome es también se conoce como la "enfermedad carnívora", ya que en los casos graves puede generar necrosis (muerte) de los tejidos que recubren los músculos. Además, según los CDC, las complicaciones son comunes y se suelen generar "debido a los órganos que dejan de funcionar y a que el cuerpo entra en choque".
Esas complicaciones incluyen "la amputación quirúrgica de extremidades y la formación de cicatrices pronunciadas por la extirpación quirúrgica de los tejidos infectados". Afortunadamente, la infección "raramente es contagiosa", pero "cualquier infección por estreptococos del grupo A puede causar el síndrome, y estas bacterias se transmiten con mucha facilidad".
En esa línea, el ministro de Sanidad, Keizo Takemi indicó que la bacteria se transmite a través de las gotitas respiratorias y el contacto con las superficies. Cabe destacar que cualquier persona puede presentarla, pero es más común en los adultos de 65 años o mayores, y la diabetes y el alcoholismo aumentan el riesgo de padecerla.
Síntomas, tratamientos y medidas de prevención
El síndrome de choque tóxico estreptocócico según los CDC, generalmente comienza con fiebre, escalofríos, dolores musculares, náuseas y vómitos. Después de que aparecen los primeros síntomas, "solo suele tomar unas 24-48 horas para que la persona empiece a tener baja presión arterial", lo que sería un indicador de que la enfermedad se está agravando.
Cuando se convierte en un caso grave, según la misma institución, se presentan los siguientes indicios: "Baja presión arterial (hipotensión); frecuencia cardiaca más acelerada (taquicardia); respiración acelerada (taquipnea); "otros signos de que los órganos no están funcionando (insuficiencia orgánica)". Para el tratamiento, se utilizan antibióticos, pero también es necesario la "atención médica hospitalaria".
En ese sentido, el doctor Ugarte, recalca que es fundamental recibirla, ya que se "suelen necesitar cuidados intensivos como la administración de líquidos endovenosos y drogas para estabilizar la presión arterial y soporte de las insuficiencias orgánicas que pueden presentarse en casos graves de SSTE".
Además, "en muchos casos, también es necesario realizar una intervención quirúrgica de emergencia para eliminar el tejido infectado y evitar la propagación de la infección.
Esta cirugía es crucial para detener la progresión del síndrome y mejorar las posibilidades de recuperación del paciente", agrega. Aunque no existen vacunas para prevenir el síndrome, los CDC recomiendan aplicar algunas medidas que pueden ayudar a evitar la infección, entre ellas "limpiar y cuidar las heridas, lavarse las manos a menudo y tomar antibióticos si se los recetan".
En esa línea, el jefe de la Unidad de Pacientes Críticos de la Clínica Indisa destaca que a pesar de que "no ha sido considerado contagioso en el sentido tradicional, es crucial seguir buenas prácticas de higiene y cuidado de heridas para prevenir infecciones bacterianas, incluyendo el SSTE. Además, cualquier persona que presente síntomas debe practicar medidas de urbanidad respiratoria al toser y buscar atención médica de inmediato para recibir un diagnóstico y tratamiento adecuados".