En marco de la contaminación del Lago Villarrica, se presentó una nueva boya que podría controlar el brote de microalgas mediante un avanzado sistema de ultrasonido.

La instancia contó con el delegado presidencial, José Montalva, el seremi de Medio Ambiente de La Araucanía, Félix Contreras, el director de la Dirección General de Aguas (DGA), Eduardo Abdala y el alcalde de Pucón, Carlos Barra, junto al capitán de Puerto, Paul Hudson.

Esta boya de ultrasonido servirá para controlar los florecimientos de algas mediante un convenio entre la Municipalidad de Pucón y la compañía Water IQ Technologies, iniciativa originalmente llevada a cabo por la Seremía de Medio Ambiente.

En cuanto a esta nuevo sistema, el delegado presidencial dijo que "vinimos a revisar un proyecto piloto, con una nueva boya que va a permitir terminar con las algas en ciertos sectores del lago. Es un convenio que se ha celebrado entre la empresa privada y el municipio de Pucón y que fue articulado por el seremi de Medio Ambiente, para ver si resulta".

Además, el delegado añadió que "con el alcalde hemos conversado, si es que sirve, queremos adquirir estas boyas para playas aptas para el baño, donde se generan estas algas, para entregar un servicio para los turistas. Porque tenemos que hacer un esfuerzo muy grande para cuidar el patrimonio natural de La Araucanía, que es su patrimonio ambiental".

Finalmente, Montalva concluyó mencionando que "si no cuidamos nuestro patrimonio natural, difícilmente vamos a poder seguir generando una industria sin chimenea como es la del turismo".

Por otro lado, el seremi de Medio Ambiente señaló que "esta iniciativa corresponde a un proyecto piloto para evaluar el efecto de la tecnología de ultrasonido sobre las comunidades biológicas en la Bahía La Poza del Lago Villarrica. Este proyecto piloto considera la instalación de una boya de ultrasonido por tres meses para el control de eventos de bloom de algas en el lago Villarrica".

Además, Contreras agregó que "se ha comprobado que el uso de este tipo de tecnología ha permitido recuperar ecosistemas afectados por la proliferación de algas nocivas y mitigar la posible liberación de toxinas en el agua y el potencial riesgo de un efecto negativo en la salud de las personas y animales". Según detalló el medio previamente mencionado, esta tecnología permite entrar en contacto con las células de las algas, haciendo que estas pierdan su flotabilidad.

La velocidad de este efecto además, será distinta en base a la especie de algas, ya que por ejemplo algunas necesitarán una semana de exposición mientras que otras pueden tomar hasta tres semanas o más.

Por otro lado, Contreras comentó que este tipo de tecnología en otras lagunas ha obtenido "excelentes resultados", explicando también que se están realizando monitoreos de zooplancton y aves en el agua para que revisar que las boyas no afecten negativamente a estas especies.

En la instancia también se hizo una revisión de las boyas de la DGA, las cuales entregan una serie de indicadores del lago para tomar la s decisiones en cuanto a la descontaminación del cuerpo de agua.

Finalmente, el alcalde de Pucón concluyó diciendo que "hoy se está monitoreando el lago cinco veces por semana, no podría decirse que hay una despreocupación, todo lo contrario".