Fisura en roca de Salto del Laja alerta otros riesgos geológicos en la región

Regional

Crónica

25/08/2023


Por Montserrat Serra Cárdenas

El pasado miércoles 23 de agosto, se confirmó el cierre temporal del sendero de la principal cascada de los Saltos del Laja, en la provincia del Biobío, tras el descubrimiento de una fisura en la roca que sustenta el paso peatonal.

Un incidente desencadenado por las recientes e intensas lluvias, con el consecuente aumento del caudal del río Laja, que ha encendido las alarmas en materia de seguridad a nivel regional, tema que aborda el doctor Mauricio Espinoza, académico del Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Concepción (UdeC).

Según sus explicaciones, la presión generada por el agua en los sedimentos de la roca incrementa el riesgo de una fractura o, incluso, de reactivar una posible ruptura anterior. La amenaza principal radica en que el bloque adyacente a la roca afectada podría colapsar y caer, lo que lleva a la necesidad de implementar medidas preventivas con prontitud.

Toda esta agua está ejerciendo una presión en los poros de la roca, lo que hace que se pueda fracturar. Se deben tomar medidas preventivas”, advierte el doctor en Ciencias Geológicas. Y no sólo en los Saltos del Laja.

Más lugares en riesgo

Porque la Región del Biobío presenta varios lugares que son susceptibles a eventos de remoción en masa, como desprendimientos de rocas y deslizamientos, desencadenados por lluvias intensas o terremotos.

Sectores ubicados hacia la Cordillera de la Costa como Cocholgüe, Tomé, Talcahuano, Coliumo y Tumbes enfrentan estos fenómenos anualmente, con mayor intensidad durante periodos de lluvias agudas, como ha sido el sistema frontal de estos últimos días.

El doctor Mauricio Espinoza, en conjunto con la geóloga del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) Natalia Sepúlveda, concuerdan en que el riesgo geológico se explica porque en la mayoría de estos sectores se desarrollan pendientes pronunciadas en rocas sedimentadas y estas se caracterizan por tener menor resistencia. Es el caso de las rocas de la Formación Curanilahue.

Prevención y desafíos

Por la situación geológica local, son diversas las medidas de prevención y reducción del riesgo que deberían implementarse, según relevan ambos especialistas, tanto actualmente en los Saltos del Laja como en otros sitios susceptibles ante eventos meteorológicos extremos.

Una de las principales que mencionan es la restricción del acceso a la zona afectada para evitar la acumulación de peso que podría desencadenar un colapso. Por lo tanto, se hace imperativo evitar el tránsito de personas y vehículos en dicha área.

Y la evaluación detallada de la situación en terreno se torna esencial para determinar la probabilidad de deslizamiento de la roca. Con este fin, el Sernageomin lleva a cabo análisis exhaustivos en el sitio de ruptura.

Además, para prevenir estos sucesos plantean la importancia de identificar claramente los lugares donde ocurren estas remociones de masas e inundaciones mediante estudios específicos realizados tanto por Sernageomin como entes municipales y universidades.

Generar mapas de peligro geológico y de inundación, además de modelos de pronóstico para zonas afectadas y períodos de recurrencia, también considerando los efectos locales del cambio climático, son otras acciones que resultan esenciales. Igualmente, recalcan que desarrollar un monitoreo continuo de las áreas de riesgo identificadas y políticas públicas adecuadas son necesarias para la moderación efectiva de estos problemas.

En este sentido, hacen hincapié en lo necesario de incorporar de manera efectiva estudios de riesgo geológico y de diversas amenazas en los planes reguladores, y que éstos sean respetados a la hora de destinar la clasificación de uso de suelos.

Por lo mismo también se evidencia la trascendencia de contar con mayores recursos humanos, económicos y técnicos para poder monitorear y prevenir estas problemáticas, además de incorporar profesionales de las geociencias (geología, ingeniería geológica, geofísica, etcétera) en los organismos estatales que tratan estos peligros. De hecho, existe la campaña “Un Geocientista por Municipio”, que destaca la importancia de la participación de expertos en las municipalidades para un estudio local y constante de zonas de riesgo en sus territorios.

Por lo pronto, mientras los expertos continúan sus investigaciones y evaluaciones en los Saltos del Laja, las autoridades locales mantienen una postura cautelosa en torno a la fisura en la roca del sendero, priorizando la seguridad de la comunidad y los visitantes. La situación resalta la importancia de la vigilancia constante y la colaboración entre entidades científicas y gubernamentales para garantizar la seguridad en áreas de interés turístico y geológico.



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