Las razones detrás de que "no cuadren" los precios, y la escasez de pescados y mariscos en Chile

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30/10/2023


Durante casi una semana un concierto de voces levantó la preocupación por la escasez de pescados y productos del mar, además de su alto valor. Esto, en un país con más de 6 mil kilómetros de costa. "Inexplicable" y "no me cuadra", eran frases que se repitieron en una seguidilla de mensajes en medios que dieron cuenta de las quejas.

El primero en alzar la voz, fue Rómulo Miño, quien dijo que "más de 4.000 kilómetros de costa, uno de los océanos con mayor diversidad de especies, podríamos ser la envidia de muchos, sin embargo, en un país fundamentalmente marítimo consumir pescado es prácticamente tabú. Ayer fui a una feria libre y encontré el kilo de reineta a $8.000 y el de merluza austral, a $9.600. Eran los pescados más baratos del local".

"A mí no me cuadran estos precios, aunque sospecho que al pescador le deben pagar una miseria, cabe preguntarse por cuántas manos pasa el producto hasta llegar a público. Tengo la impresión de que es una cadena de distribución extremadamente cara y con abultados márgenes", sostuvo Miño. En esa misma línea, Rodrigo Galecio respondió a Miño y sostuvo que "definitivamente es inaceptable que con el gigantesco mar que tenemos en frente, no podamos consumir productos marinos".

"Al respecto una pequeña anécdota: estuvimos viajando cuatro personas durante quince días el pasado abril por la Carretera Austral y no sé si tuvimos demasiada mala suerte, pero nunca, en todo el viaje, pudimos comer en ningún restaurante otro pescado que la merluza o a veces el salmón, y para qué decir los mariscos; fue como si en el mar de Chile no existieran. Indignante, efectivamente algo no cuadra", agregó.

Por su parte, Andrés Berg, afirmó que "como pequeño productor de trucha arcoíris que intenta comercializar sus productos frescos en el mercado local, me cuadra perfectamente la frustración".

"El solo alimento que requieren los peces para engordar representa no menos de 5 mil pesos del precio por kilo de pescado faena. Adicionalmente, tenemos la obligación de mandar muestras varias veces al año para chequear la sanidad de los peces y agua, donde además de pagar el laboratorio, hay que contratar a otra empresa para que tome y envíe las muestras", explicó Berg. Junto a ello, agregó "qué decir de toda la burocracia sanitaria y municipal para recién aspirar a comercializar, sumados a la cadena de frío, transporte, y por su puesto, toda clase de impuestos".

Las explicaciones: Factor climático

Diversos actores expusieron factores ligados a la pesca ilegal, climáticos, alto precio del combustible para navegación o la elaboración de productos para consumo directo como conservas o apanados. Desde la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura señalaron que "es necesario considerar que actualmente la Corriente del Niño tiene un impacto observable en la disminución de la disponibilidad de algunas pesquerías, en gran parte del país, por el aumento de las temperaturas".

En ese sentido plantearon que "el proyecto de nueva Ley de Pesca que se presentará próximamente al Congreso contempla reforzar el consumo humano y reducir la cadena de comercialización".

A su vez, el seremi de Economía de la Región del Biobío, Javier Sepúlveda, comentó en relación a la disponibilidad de recursos del mar para el consumo humano -tales como reineta y merluza- que "en Chile impera un modelo económico de libre mercado en donde son las fuerzas de oferta y demanda la que determina la disponibilidad de estos productos para el consumo final".

Dicho eso, sostuvo que "las posibilidades de planificar la producción, la distribución y la comercialización por parte del Estado son bien limitadas y son, por lo tanto, las fuerzas de mercado las que van determinando la disponibilidad". Sin embargo, apuntó que "hay diversos factores que han estado influyendo últimamente en estos recursos.

El principal de ellos es el cambio climático (...) hay otros que tienen que ver con la propia acción del ser humano de forma directa, como lo es la pesca ilegal (...) y las cuotas de pesca, con la distribución por zona".

Quien suma más factores es Sergio Ávalos, buzo mariscador de la Caleta Coloso de la región de Antofagasta. Como cada día, Ávalos y su grupo salen en busca de distintos productos del mar, son variadas las dificultades que enfrentan y que pueden determinar un mal día y una vuelta a tierra con "las manos vacías".

El buzo mariscador respondió a las inquietudes y explicó que "yo creo que si no encontraron mercadería es porque algunas veces el tema de la pesca tiene que influir mucho con los factores del clima, marejada, turbio".

"Aquel que se queja de que no hay productos del mar, que no hay pescado, que se percibió que no había marisco, puede también que sea por la explotación misma del recurso", agregó. Asimismo, aseguró que tiene que hacer viajes más largos para encontrar productos. Lo que significa un mayor gasto de combustible para las embarcaciones, lo que se traduce en un alto costo para él.

"Tuve que hacer un viaje de cinco horas y llevar dos embarcaciones, una para bucear y otra para tirar la red y tuve un gasto de $642 mil, $400 mil en pura bencina, $80 mil en aceite de dos tiempos, entonces, son $480 mil de base en puro combustible y lo otro es comida y hielo para mantener tu producto", relató.

Por eso Ávalos sostuvo que "cuando tú traes un recurso lo tienes que ir a buscar a mucho más distancia, entonces sí o sí tienes que cobrar igual un poco más por todo lo que significa el traslado, el esfuerzo y todo lo que lleva a traer un producto de esa naturaleza y además también lo poco y nada que traes cuando no hay, todos quieren, entonces al final tú le vendes al que te ofrece mejor".

Por su parte, Verónica Ceballos Barrón, gerenta de asuntos públicos, Pescadores Industriales del Biobío, profundizó sobre el destino de la mercadería y detalló los porcentajes, y en particular del jurel y de la merluza. En lo que respecta al Jurel, por ejemplo, aseguró que "cerca del 90% de las capturas realizadas por la flota de las empresas agrupadas en Pescadores Industriales del Biobío, se destina a la elaboración de productos para el consumo directo, como las conservas".

En ese sentido, afirmó que solo durante el año pasado se produjeron más de 45 millones de tarros de jurel, quedando más del 60% de ese volumen disponible en el mercado local. Es decir, "permanecieron en Chile para el consumo interno 19.200 toneladas". Adicionalmente, agregó que "la pesca industrial ha desarrollado productos preelaborados, como los apanados, y que son la principal fuente de alimentos del mar en la dieta de los niños de la Junaeb. Es el caso de los nugget de merluza y prontamente de las hamburguesas de jurel".

Por eso, comparte la molestia de los consumidores. "Es comprensible que muchos sientan que los recursos del mar que recolecta y captura el sector artesanal, como lo son la reineta, la merluza y mariscos, por ejemplo, son inaccesibles y caros por múltiples razones", acotó. Ceballos enfatizó en que los recursos pesqueros que hoy pone a disposición la pesca industrial en los supermercados, almacenes de barrio y ferias libres, son; el jurel congelado y en conservas con variadas preparaciones y la merluza congelada en filetes, apanados y fresca.

Y consignó que los demás y que son capturados por la pesca artesanal, "sector donde hay muchos actores compitiendo por pocos recursos y lo que obtienes es caro, por la escasez, distancias de captura e intermediarios, que literalmente le extraen las pocas ganancias a los pescadores de orilla".

Con todo, detalló que en el caso de la merluza común, de las "17 mil 500 toneladas que nos autoriza la autoridad son destinadas en un 100% a la elaboración de productos como congelados, frescos, apanados y hamburguesas, quedando el 85% en el mercado nacional".

En promedio, en las principales cadenas de supermercados del país, el valor de la reineta es de $8.271 (500 gr), mientras que la merluza austral tiene un valor promedio $7.392 (500gr). Según cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el precio del pescado tuvo una alza anual de 8,2%, mientras que los mariscos un 5,9% en 12 meses, a septiembre.



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